Cerramos esta semana nuestra serie de posts dedicados a la Operación Bikini con la tercera fase, reafirmar.
No en vano, a menudo después de perder peso nos podemos encontrar con el problema de la flacidez y la "piel que cuelga". Las capas más inferiores de la piel, la dermis y subdermis, están compuestas de tejidos elásticos que pueden contraerse o expandirse dependiendo de las situaciones a las que se ven expuestas. Cuando se pierde peso, sobre todo si es de forma muy rápido, estos componentes elásticos de la piel pierden las capas de grasa que les permitían estirarse sobre el cuerpo. Asimismo, tal y como explican en el artículo de Líneayforma.com no tienen el tiempo ni la elasticidad para adaptarse a la nueva forma del cuerpo, y de ahí la piel extra. Además, factores como la edad, la dieta, la falta de hidratación o fumar, pueden empeorar la capacidad de la piel para adaptarse a los cambios.
¿Cómo evitar esta situación? Entre otros, os proponemos los siguientes consejos:
- Evitar perder peso demasiado rápido y hacerlo de manera gradual.
- Beber 2 litros de agua al día, ya que la cantidad de agua es directamente proporcional a la elasticidad de la piel.
- Llevar una dieta equilibrada y variada, rica en proteínas.
- Utilizar tratamientos cosméticos con propiedades reafirmantes e hidratantes.
- Realizar ejercicio de manera regular.
¡Hasta mañana!
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